miércoles, 20 de enero de 2016

La luz del callejón - José Miguel Gómez Acosta


La Asociación del Diente de Oro vuelve una semana más a traer la poesía a los lunes. El ciclo La luz del callejón tiene el gusto de recibir a un poeta novel, enamorado del frío y del norte, en la que esperamos sea una noche cálida en este sur nuestro. En el La Expostiva (C/ Cárcel Alta, 7). 


José Miguel Gómez Acosta


Lunes, 25 de enero de 2016
21.45 horas

Presenta: Ana Paula Ruiz Jiménez



José Miguel Gómez Acosta (1975) es arquitecto, pintor, traductor y poeta.
Dirige junto a Daniel López la revista Márgenes. Forma parte del grupo de pintores Grupo de Aulago y del grupo de investigación Arquitectura y Cultura Contemporánea. Ha colaborado y colabora con periódicos y publicaciones de arquitectura, cine, artes gráficas o literatura.
El Gran Norte (Point de Lunettes, 2015) es su primer poemario y ha sido galardonado con el Premio Federico García Lorca de poesía de la UGR. Premio de creación que ya había ganado en dos ocasiones más (Premio Federico García Lorca de cuento en 1997 por «El pabellón de lo elefantes» y Premio Alonso Cano UGR de arquitectura por «Oslo» en 2012).

El poema con el que abre El Gran Norte:

JAGTVEJ

Colgaba del cielo una bocanada del cristal de los dormidos,
en Jagtvej, al lado de la tapia del cementerio.
Y la carne blanca de Eric respondía
con salmos apresurados a la ira de mis dedos.
Respondía una vez y otra
en Jagtvej, cerca de las bolsas blancas de plástico,
en Jagtvej, donde dormía y despertaba al mismo tiempo que tú,
donde los muslos de Eric sonaban como la luz destensada de los arcos,
como la luz templada que salía de las duchas.
Allí, creo que lo he dicho,
colgaba del cielo una bocanada de monedas perdidas,
una infelicidad que nacía de las ramas de los árboles frutales.
En Jagtvej, muertos de frío, desnudos,
donde nos convertimos en un vaso repleto de cenizas.


***
Próxima lectura:
Lunes, 8 de febrero - Antonio Jiménez Millán


jueves, 7 de enero de 2016

La luz del callejón - Luis Melgarejo


Nada mejor para recibir la nueva rutina que nos trae el 2016 que celebrándolo con poesía. Desde la Asociación del Diente de Oro y desde el ciclo de lecturas La luz del callejón queremos hacerlo a lo grande, con un poeta recién regresado de sus andanzas norteñas, y tan peculiar que siempre es un placer y una sorpresa poder escucharlo. Os esperamos, como siempre, en el co-espacio cultural La Expositiva (c/ Cárcel Alta, 7).


Luis Melgarejo

Lunes, 11 de enero de 2015
21.45 horas



Luis Melgarejo (La Zubia, Granada, 1977) ha publicado hasta la fecha dos libros de poemas: Libro del cepo (Hiperión, Madrid, 2000), con el que obtuvo el XV Premio de Poesía Hiperión, y Los poemas del bloqueo (Cuadernos del Vigía, Granada, 2008; 2ª edición corregida y ampliada), que fue Premio Javier Egea de Poesía en 2005. 
A lo largo de estos últimos años, poemas suyos se han ido recogiendo en numerosas antologías y revistas literarias a ambos lados del Atlántico. Imparte talleres de creación literaria y animación lectora en bibliotecas, centros educativos y centros de enseñanza de adultos dentro y fuera de Andalucía. En La Zubia, enfrentico la iglesia, junto con su familia y la gente de la Asociación Cultural La Zagüía, saca adelante La Casa Con Libros, un espacio que, además de como alojamiento rural, taberna y tetería, funciona semanalmente como biblioteca y centro social en el que se acogen actividades culturales de toda índole. En colaboración con el colectivo La Palabra Itinerante, investiga en el ámbito de la poesía escénica y de la pedagogía literaria y, junto con el guitarrista bonaerense Esteban Jusid y el artista plástico granadino Iván Izquierdo, saca adelante desde hace ya unos años Subdesarsur, espectáculo interdisciplinar que aúna poesía, música y pintura. Actualmente, y mientras espera a que España deje de ser la de los Reyes Católicos o algo aún peor, vive a caballo entre Granada y la ciudad polaca de Łódź. Acaba de terminar un tercer libro todavía inédito, Tiritañas y guiñapos, y es padre ya desde hace apenas un año de una niña hermosa y fuerte.


LA LENGUA SIN SANGRE ENTRA 

Lo importante es hablar y escuchar, entenderse.
No morirse de amor. Ni matar. Ni de hambre.

Lo primero es lo dicho, las lenguas.
Y después van los libros, lo escrito.

Abrazarse, bailar. Comprender y jugar.
No mentir. No olvidar ni a difuntos ni a vivos.

Sólo así. Sólo entonces.

Con lo escrito llegaron las leyes,
los desahucios, el fax, las gramáticas
y las lindes y el odio y la sangre.

Con lo dicho sucede el milagro y
sólo entonces quizá comprendemos
que las lenguas son casas abiertas.

Sólo así. Sólo entonces. Y aún así no se sabe.